Toulouse es una de las ciudades más bonitas de Francia con una arquitectura atractiva, una rica historia, una zona soleada y un espíritu amistoso y relajado. Fue erigida sobre las ruinas de un antiguo asentamiento romano, que, aún hoy, se evidencia en las pintorescas curvas de sus calles y bulevares. Gracias al uso generalizado del ladrillo rojo en la construcción, a Toulouse le dieron un segundo nombre: la Ciudad Rosa.